Conservación Ruedas

1) Pulveriza BRAKE CLEANER
2) Limpia con ayuda de un paño limpio y seco.

1) Pulveriza el producto sobre la llanta fría.
2) Déjalo actuar durante 2 minutos. 
3) Si es preciso, frota con una esponja o un cepillo.
4) Aclara con agua abundante. 
5) Seca la llanta con un paño limpio para un resultado óptimo.

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1) Empieza quitando el objeto punzante.
2) Haz girar la rueda para que el agujero quede hacia abajo.
3) Agita el envase, luego enróscalo en la válvula y vacíalo al máximo (hasta que esté vacío o hasta que la espuma empiece a salir por la válvula porque el neumático esté lleno).
4) La espuma se va a repartir por el neumático y a salir por el agujero, así que cuando se seque, lo taponará.
5) Haz unos kilómetros a baja velocidad para que el producto se distribuya correctamente dentro del neumático.
6) Vigila periódicamente la presión del neumático antes de dirigirte a un profesional en un plazo máximo de 24 a 48 horas tras el pinchazo. Pasado ese plazo, corres el riesgo de que la solución química dañe tu llanta y tu neumático.
7) Acude a un taller para reparar el neumático de forma definitiva.